miércoles, 3 de agosto de 2016

No sé cómo. Pero comí.

No sé cómo lo hiciste pero lo lograste. 

Me enseñaste que no solo las carreteras están en el suelo,
porque aprendí a andar de puntillas sobre tu espalda,
a mirar a los precipicios sin sabor a despedida.
A besar la curva más bonita de tu cara donde más tarde yo ardería.

No sé cómo lo hiciste, pero lo lograste. 

Me enseñaste a amar desmesuradamente, 
a cerrar los ojos y llegar a casa.
A amar sin condicionales.
Me enseñaste tantas cosas que al final saqué demasiada nota en este examen. 
Pero no me advertiste
que todo tiene un precio. 
Y un buen maestro lo cobra caro. Viniste para no quedarte.
Me volviste vulnerable para arrancarme los sentidos, taladraste todas mis fortalezas y todo ello para nada. 
Para desaparecer cual globo de helio en un cielo encapotado.

No sé cómo lo hiciste, pero lo lograste. 

Te doy la enhorabuena. Profesor. Ladrón. Y poco poeta. 

C.T

No hay comentarios:

Publicar un comentario