A veces me pregunto que es la felicidad exactamente.
Así pues, doy fe de que todos la buscamos involuntariamente o queriendo. Y es como el número 0, puede valer o no valer. Hay días que me encuentro con gente que busca la felicidad imaginaria. Creyendo que otros se la van a aportar. Pero precisamente ésta sólo dura el tiempo que la mente y la razón quieran. Porque al corazón jamás se le puede mentir.
Eso de que dicen : ojos que no ven corazón que no siente ..
Si. Puede ser. Pero si tu corazón tiene dueño. Te vendan los ojos, das tres vueltas sobre ti mismo, y te pones a buscar. Hueles, oyes, tocas e imaginas. Y hasta que esa fuerza, ese sexto sentido y ese verbo denominado -amar- no se vaya de tu interior, es muy fácil mentirte a ti mismo.
Pd: olvidarte es muy fácil si me lo propongo como tú.
(... volviendo a la mentiras)
Claudia T.
que maravilloso que escribes
ResponderEliminarabrazos desde Miami