lunes, 25 de noviembre de 2019

Buildings 


Almas hechizadas por conflictos de poca monta

que ni tú, ni yo estamos preparados para entorpecer.


Terrazas que huelen a cafés y cañas,

a prisa y estrés.


Gente que no son gente. 

Tú que hueles a mi 

después de una noche larga de verano. 


Estrellas distraídas mirándose por el camino infinito de luces perdidas

sin semáforos. 


Nos dijimos adiós después de tantos años, y no nos dijimos nada más 

que un par de vocales 

sin

sonido.


Me tiraste un beso por la ventana de ese edificio manchado de mi colorete

que aún llevas en el pantalón.


Diría que tú fuiste el enigma de tanta sangre de tinta en mis vértebras 

Y que he hecho un trabalenguas sin quererlo.


Puede que ni tú ni yo tengamos ni motivos ni razón.

Pero aquí estamos.

Tú 

Y

Yo.


C.T



martes, 13 de noviembre de 2018

Tú un martes 13



Fue cuando bailamos a medio eclipse

debajo de cientos de miradas.

Paramos tú y yo los segundos del sol.

Hicimos tú y yo un espectáculo incrédulo y malabarero.


Fue cuando abrí las piernas a tu casa 

y las rodillas te flaqueaban.

Había tanta ausencia de complejos 

que las arañas no estaban en sus esquinas, sino en un safari nuevo. 


Así fue como perdí el cariño a lo prohibido 

a ser amante del frío 

a no tenerte bajo custodia 

a regarte primaveras en diciembre.


(Besé tu cornisa decorada

con los suficientes salientes 

para ser tú el menor protagonista 

de tu pequeña casa)


Ahí donde los valientes salen a jugar a cambiar el mundo

Y los mundanos como tú a tejer nanas a 

niñas sin pecas como yo


C.T

sábado, 23 de junio de 2018

No more times you said, and you’re crying again



A veces necesitas calmar el calor de la lluvia, el fuego del hielo, el hambre del rugido. 

You deserve life

Un juego de tronos. Juego de cicatrices 
mal creadas por variables constantes en 
direcciones opuestas. 

Una melodía con el mismo tempo que 
te aturuya los oídos acostumbrándolos 
a darle más intentos.

Tristes baladas que acongojan corazones vivos 
que están rotos murmurándote auxilio 
sin ningún tipo de vocal ni consonante que 
les acompañen.

Manos que no son manos, 
recuerdos de la piel fundida con deseo. 
Desfiladeros eternos y 
subidas furtivas 
por donde nadie sabe en qué dimensión terrestre 
les invaden.

Y así, con una taza de café por delante. 
Un papel vacío, ya no solitario.
Encuentran la elipsis perfecta en ese agua tibia 
que ya no se sabe en qué lugar está, 
siendo arropada por el viento, 
alguna hoja caduca que ya no tiene propiedad..



C.T

domingo, 17 de junio de 2018

Delitos que suenan



El corazón de una persona se puede romper varias veces
pero nunca como la primera.

Mis tacones suenan en tus escaleras
mi norte ya no es norte, sino la brújula entera.

Que más da.
Sabíamos lo que perdíamos
conscientes de tanto hielo
en nuestras golpeadas caricias.

Ser consciente.

Seguro que mataría por más asesinatos
a mis vértebras con ese frío
que quema.

Pero más quema la certeza,
que en el amor hay uno que sufre y otro
que reza.

Y yo ya morí rezando y resucité medio ciega.
Prefiero el gélido olvido a tus excusas de pega.

Que en esta guerra civil todas las batallas quedaron muertas.
Saldadas con hambre y demasiadas grietas.
C.T

miércoles, 30 de mayo de 2018

Rosas





Fuimos rosas en noches de espinas
contemplándose desde el cariño
con rayos tras la ventana.

Fuimos aire los días en los que no había sombra en la que regocijarse.
Me gustaba andar por Malasaña
porque es igual que callejear por tu espalda.
Cada calle un perfume diferente
bañada en unas cuantas salsas de
esperanza.

Hay baldosines que quieren romperse
cada vez que me acuerdo de tus primaveras
tan efímeras como tus enfados en luna nueva

Hablábamos de tropezar con gente raramente igual
la cual nos hiciera más peatones en pasos de cebra a diferentes compases.

Nos quisimos regalar margaritas sorteando a boletines de bingo sus respuestas.

Verdad o mentira
Que tú y yo fuimos dos almas vivas.

C.T

miércoles, 23 de mayo de 2018

¿Y ahora?





Acordé con mis mariposas
un desierto de sequía cognitiva
Inexorable sed de razón a 
cuerpos tardíos que vienen ambos
a tronarte la cabeza.

Con mil musarañas que andaban pardas
por las esquinas de mi casa

Allí tienes en la nevera un montón 
de dulces amargos,
que no esperan más que ser comidos por
personas hambrientamente enamoradas.

Dime dónde se quedó eso
y las ganas de seguir poniendo un pie sobre tu asfalto.
Que estamos petrificados en una espiral sin salida,
creada con tanta ansia que hasta ese hielo, no nos calcifica.

Dónde estarán las caricias en forma de lengua de gato
que erizan la sien a la vez que te trastornan un rato.

Allí donde las naves espaciales se quedan sin 
excusas,
nosotros éramos de encenderlas sin tener que echarle 
a nadie la culpa.

Acordamos tantos trabalenguas. Que trabados estamos.
Sin mirilla ni rejas.

C.T

martes, 10 de abril de 2018

Extraterrestre




Y no sabes que a la orilla de cada edificio 
hay vértices que me recuerdan a tu ombligo.
Hay cascadas invertidas que hacen amago a tu temperamento.
Y que me muero de hambre 
por recordar tus manías e imperfecciones.

Escribo en folios ficticios,
de personas ficticias, de quien sabe qué tortura 
se me ha pasado por la cabeza.

Mientras hoy llueve en Madrid, 
yo me quedo con las ganas de conocer
mis rincones clandestinos.

Porque por más que viaje a otras ciudades
solo las situaciones que sean planeta
me desvelan parte de mi tierra.

C.T

viernes, 6 de abril de 2018

Ruido



Nunca te has dado cuenta que 
el amor es como un ruido a media noche.
Solo estás tú, dormido
Tú, contigo mismo.

Y de repente, oyes algo que te pone en tensión,
Se te aceleran las pulsaciones.

El amor es como un ruido a media noche

Te atropella, no te lo esperas,
te hace estar alerta.
Y así, sin darte cuenta
tienes todos los sentidos activados
menos la vista.

Lluvia de preguntas.
Estás incómodo
ya no lo tienes bajo control.
Estás nervioso.

El amor es como un ruido a media noche.

Eso es, te ciega. 
Te da miedo pero quieres que
se repita otra vez. 

Aventurarte con algo de miedo.
No sabes de dónde viene.
Ni cómo viene.

Te escondes
Palpitas
Te encrespas
Sudas
Imaginas
Tienes ganas de que se repita

¿Es adictivo verdad?

El amor es como un ruido a media noche

Ni se toca. Ni se ve.
Me desvelas.

C.T

miércoles, 15 de noviembre de 2017

words dealer


Hay quien entiende de senderos,

de casualidades, de destinos.

Tú nunca fuiste una casualidad. Ni una línea infinita sin indicarme el Norte, el Sur, el Este o el Oeste.

A veces, una línea es mucho más ligera y significante que un montón de palabras adornadas.

Es algo capaz de erizarte la piel
cada vez que lo encuentras.

Elipsis

C.T

lunes, 30 de octubre de 2017

Sal de lo que crees que eres 



Eres la gota que colma el vaso.

Un sinsentido de palabras y formas de ser
que si lo miras con perspectiva
forman un exclusivo mural. 

La de veces que arrancamos ira de la nada, 
y apaciguamos la tormenta exponiendo nuestras cartas.

Eres la gota que colma el vaso.

Un estallido sin nombre que vive en una cuarta dimensión.
Un coyote que huye cuando se ve rodeado de realidades.

Cogiendo toallas, que no tirando
porque no quiere que le desnuden el alma
ni le arañen la espalda.

No hay sueños que valgan. 
Ponte la capa encima y empieza a hacerlos realidad.

C.T

martes, 24 de octubre de 2017

Scape



Si supieras comprender lo que significa
tan solo un cuadro de luces 
sin armonia como nosotros,
ardiendo cual infierno entre labios.

Tú que ignoras todo tipo de letra y hazaña
que recibes con veneno
Sabe Dios, que el amor y el cielo
van de la mano.
Eres capaz de encogerme el corazón y ni tan si quiera 
saber que me he perdido.
Con y sin(tigo).

Yo no sé tú. 
Pero mirar la ciudad desde cualquier vértice de tu cuello
me crea una sensación de vértigo.
Porque no se si perderme o encontrarme 
aquí
a solas
o con el viento.

C.T

martes, 2 de mayo de 2017

Edificios vacíos

Qué fácil es taladrarnos los oídos, 

airear los versos

inventar poesía

mentir entre líneas y exagerar romances.


Qué difícil es querer sin medida, sin miedo al arte. 

A volcarnos en nuestros huesos vacíos y rellenarlos de idiomas que lleven nuestros nombres.


Lo fácil es que seas difícil a tus treinta y tantos

que te pierdas en tus manías y latas de conserva de la pubertad.


Te estaré esperando en uno de esos edificios de la cuidad, que están aún sin colonizar. 

Bellos por fuera, incógnitos por dentro.

Quizás este fin de semana. Quizás mañana. O tan solo 

quizás.


C.T